Ciudad de México / domingo, 12 de diciembre 2010
Distrital Revista
El vicario episcopal de Guadalupe, Diego Monroy, consideró necesario pedirle a la Virgen de Guadalupe su amparo y protección para curar las aflicciones que se ciernen sobre el pueblo de México.
Al presidir la eucaristía solemne en honor de la Virgen de Guadalupe, recordó que si los mexicanos son coherentes con su fervor guadalupano, "nada hay que pueda espantarlos o turbarlos, pues están bajo el manto protector de un mensaje de paz, de amor y fraternidad".
El jerarca religioso señaló que se necesita el aporte y la responsabilidad de todos los mexicanos para salir adelante, porque si bien hay injusticias y desigualdades inaceptables, la responsabilidad no es sólo de los gobernantes o de la gente de dinero.
Durante la homilía, se registró un incidente menor provocado por un grupo de feligreses que ingresó a base de empujones al templo mariano.
Recién terminada la tradicional interpretación de Las Mañanitas a la Guadalupana, esos peregrinos lograron vencer el cerco de seguridad y comenzaron a llenar los pasillos desplazando inclusive las bancas más cercanas a las entradas.
El momento crítico duró unos cinco minutos, hasta que los elementos de seguridad retomaron el control de los accesos. Algunas personas que sufrieron desmayos, fueron atendidas en el lugar por paramédicos.
Una vez restablecido el orden, el rector del santuario y vicario episcopal de Guadalupe, monseñor Diego Monroy Ponce, reiteró el mensaje de la Virgen Morena, patrona de México, de luchar por los bienes y valores que el pueblo mexicano quiere y merece. (Con información de Notimex)
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