Ciudad de México / domingo, 26 de diciembre 2010
Distrital Revista
México mantiene la confianza entre los inversionistas pese a la incertidumbre -aún existente- en los mercados financieros internacionales, gracias a la disciplina fiscal y al manejo adecuado de la deuda durante la última década, afirmó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Además, permitió al gobierno federal instrumentar una política fiscal contracíclica, responsable y oportuna sin deteriorar las finanzas públicas, a diferencia de otros países o del mismo México en el pasado, añadió la dependencia en el Informe Semanal de su Vocería.
Destacó que durante 2010 se realizó un esfuerzo adicional por fortalecer la confianza internacional en los mercados financieros de México, vía instrumentos como la renovación de la Línea de Crédito Flexible y las coberturas petroleras, entre otras medidas.
Entre ellas, mencionó que en agosto pasado se instaló el Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero, órgano encargado de supervisar los riesgos macroeconómicos y financieros, el cual permitirá actuar con mayor rapidez y precisión ante riesgos sistémicos.
En la nota informativa “Acciones y resultados de la SHCP en 2010, parte III”, informó que en la segunda de las dos sesiones del Consejo en este año se acordó la formación de cuatro grupos de trabajo que cooperarán en la detección de acumulación de riesgos sistémicos y se revisó el avance de la reforma financiera internacional y su posible efecto en nuestro país.
Otra medida para fortalecer al sistema financiero fue la publicación de reformas en materia de transparencia, así como aquéllas para incentivar la competencia, con las cuales se reduce el costo de los servicios financieros y se transparenta el cobro de tasas de interés y comisiones.
En este sentido, se prohibieron de manera expresa algunos tipos de comisiones (por retiros en efectivo, consulta de saldo, pago de créditos, con la propia institución de crédito que lleva la cuenta), se limitaron otras y se observa un descenso gradual del diferencial entre las tasas de interés activa de la cartera total y pasiva de la captación bancaria.
La dependencia refirió que la tasa de interés activa pasó de 8.91 por ciento en junio de 2009 a 7.95 por ciento en junio de 2010, mientras que la tasa de interés pasiva descendió de 4.58 a 3.27 por ciento en el mismo lapso.
Además, se continuó fomentando un mayor acceso a los servicios financieros a través de corresponsales bancarios (comercios e instituciones que establecen relaciones de negocio con un banco, con el fin de ofrecer, a nombre y por cuenta de éste, servicios financieros a sus clientes) y vía un mayor desarrollo de la cultura financiera.
Señaló que a junio de 2010, 11 instituciones bancarias fueron autorizadas para ofrecer servicios a través de corresponsales bancarios, estableciendo contratos con 655 comercios que cuentan con cinco mil 107 establecimientos.
La Secretaría de Hacienda adelantó que cinco instituciones bancarias más están por recibir autorización, lo que ampliará la red a más de 15 mil puntos de acceso a servicios financieros básicos.
En tanto, apuntó, las acciones de la banca de desarrollo se enfocaron en la atención de la población en sectores prioritarios que se encontraban desatendidos por el sector financiero privado.
A septiembre de 2010, el saldo de crédito directo e impulsado de la banca de desarrollo fue de 658 mil millones de pesos, el segundo más alto del que se tiene registro, lo que equivale a 5.1 por ciento del PIB.
“Hoy en día, el financiamiento que otorga la banca de desarrollo es casi 67 por ciento mayor que al inicio del sexenio”, destacó.
Se permitió que las Sociedades de Inversión Especializadas en Fondos para el Retiro (Siefores) adquirieran distintos instrumentos, con nuevos límites de exposición por grupos de edad, con la finalidad de lograr rendimientos competitivos para el retiro de los trabajadores.
Con ello se ha logrado que en los últimos 12 años las inversiones de los recursos de los trabajadores hayan alcanzado un rendimiento promedio de 13.5 por ciento anual, expuso.
Como acciones complementarias, agregó, el gobierno mexicano decidió renovar para 2010 la Línea de Crédito Flexible (LCF) por un monto aproximado de 48 mil millones de dólares, ofrecida por el Fondo Monetario Internacional (FMI) a los países con políticas económicas sólidas con el objetivo de enfrentar alguna contingencia económica.
Además, para 2010 México volvió a optar por coberturas petroleras en opciones tipo put para garantizar un precio del petróleo de 57 dólares por barril, con lo cual se protegió el nivel de ingresos petroleros del gobierno federal previsto en la Ley de Ingresos de 2010 y, con ello, la ejecución del gasto público aprobado en el Presupuesto de Egresos para este año. (Con información de Notimex)
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