CIUDAD DE MÉXICO / domingo, 15 de agosto de 2010
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La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) advirtió la crisis humanitaria que afronta Pakistán es enorme y sigue empeorando.
La destrucción masiva continúa a medida que los torrentes de agua fluyen hacia el sur del país, desbordando ríos e inundando llanuras.
La agencia advirtió que la crisis no terminará cuando acaben las precipitaciones o retrocedan las aguas, ya que el fenómeno provocó la pérdida de viviendas, y está causando hambre y enfermedades.
El ACNUR compró a proveedores locales tiendas de campaña para hacer frente a las necesidades de protección y refugio de los damnificados.
Por su parte, el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) informó que en los últimos días al menos 13 mil niños, mujeres gestantes y madres que han dado a luz, recibieron vacunas contra el sarampión, la poliomielitis y el tétanos.
Así mismo, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) indicó que hasta el momento ha distribuido raciones de comida suficientes para un mes a unas 430.mil personas.
El PMA está operando con seis helicópteros y adquirió otros cuatro para reforzar la asistencia a la población afectada.
Con información de la Organización de las Naciones Unidas
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